Y en estas fechas navideñas, de recogimiento familiar… yo solo quiero recuperar la inocencia robada, solo pienso en estar en naturaleza, en desnudarme y perderme en una arboleda infinita. Todo lo demás me parece un artificio. Necesito volver a la esencia, al ser más puro.
Y en esta búsqueda es como descubro el particular mundo de Kurland. Sus imágenes me transportan a los Juncos salvajes, a ese despertar de la sexualidad, al paso del mundo adolescente al mundo adulto…
Justine Kurland retrata con tanta naturalidad el desnudo humano que parece irreal. Ese ideal de la vida en "comuna", esos paisajes desolados de la América más profunda, ese volver a la esencia, a ese mundo primitivo en que todo era más armónico.
No solo me fascina su trabajo, sino me fascina su manera de ver la vida: “There’s this way that photography is always about going out searching,” “I’m not the kind of a photographer who can photograph my home.”
http://www.vice.com/read/an-interview-with-justine-kurland
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